Magret de pato con salsa de moras y vino tinto

Este final de semana ya se va pareciendo más a lo que entiendo yo por otoño. Temperaturas más fresquitas, lluvia, días cada vez más cortos, más ganas de guisar.... Hay veces que guardamos los mejores platos para los días de fiesta, en los que tenemos algo que celebrar; pero ¿porqué no celebramos que estamos vivos y de vez en cuando nos damos un homenaje?

La carne del pato es una de nuestras favoritas, en especial la pechuga, lo que conocemos todos como magret. En otras ocasiones os lo hemos cocinado aquí en el blog; por ejemplo éste con  salsa de membrillo, otro con una salsa de higos (ahora en temporada), uno más clásico a la naranja, y el más original y que nos encanta con una costra aromática de mostaza.

Hoy os proponemos otra versión con un toque dulce, pero esta vez las reinas son las moras. 

Os prometí recetas saladas con las moras y aquí tenéis la primera.

¿ Apetece ?

Ingredientes (para 2 personas):

1 magret de pato hermoso

2 patatas medianas

Aceite de oliva virgen extra

Sal y pimienta

Cebollino (para decorar)

     Para la salsa de moras y vino:

1/2 cebolleta grande 

2 c/soperas de mermelada de moras

1 copa de vino tinto de calidad (200 ml)

Agua

10-12 moras frescas (opcional)

Preparación:

Empezaremos preparando la salsa, ya que es lo que más tiempo nos va a llevar. Cortaremos la cebolleta en láminas muy finas y la pondremos a pochar a fuego muy bajo y tapado con una gota de aceite. Pasados 10-12 minutos, cuando la cebolla haya transparentado y ya esté blandita, añadiremos la mermelada de moras y mezclaremos bien para que se impregne bien la cebolla y ésta se tiña con los taninos de la mora. 

Subiremos el fuego y agregaremos el vino tinto, de éste modo, cuando esté bien caliente se evaporará el alcohol. Cuando rompa a hervir, bajaremos el fuego al mínimo y dejaremos reducir.

Por otro lado prepararemos la guarnición. Pelaremos las patatas y las cortaremos en rodajas de un dedo de grosor aproximadamente. En una sartén con una pizca de aceite y salpimentadas, las iremos cocinando a fuego medio y tapadas, para qué a la par que se doren se cocinen por el interior. Iremos dándoles la vuelta cada 3-4 minutos. En total nos llevará unos 15 minutos más o menos.

Por último sólo nos queda preparar la carne. Es una carne bastante magra, es decir, la grasa está toda concentrada por la parte exterior. En está, y con la ayuda de un cuchillo bien afilado formaremos pequeños cuadros (practicándole primero cortes en horizontal y luego en vertical). En una sartén a fuego medio pondremos el magret a cocinarse, primero por la parte de la grasa, de este modo conseguiremos desgrasarlo y lograr que quede dorado y crujiente. Pasados unos 5-8 minutos, y vigilando que la grasa no se queme, retiraremos el exceso de grasa y cocinaremos el magret por la parte de la carne.

Nota: si en casa disponéis de una brasa (barbacoa) o una barbacoa eléctrica cocinar el magret ahí, el sabor es mucho mejor que en sartén.

Nota: dependiendo del punto que os guste la carne deberéis dejarlo más o menos tiempo. Para conseguir la carne en su punto, tostada por fuera y rosadita por dentro (tal y como veis en las imágenes) deberéis cocerlo (por el lado de la carne unos 6-7 minutos. Si la preferís menos hecha rebajar el tiempo a 4-5 minutos, pero si por el contrario os gusta más hecha, mi consejo es que la retiréis pasados 7 minutos, la cortéis en trozos y los marquéis por lado y lado ( de esté modo, la carne estará a vuestro gusto sin estar demasiado reseca).

Si véis que la salsa está demasiado espesa, añadir un pelín de agua y llevarla al fuego de nuevo. Para rematarla (y si disponéis de ellas) añadir las moras frescas y darles unas cuantas vueltas. Simplemente queremos que se caliente pero sin que pierdan su forma ni su textura.

Llegados a este punto sólo nos queda servir. En el fondo del plato pondremos las patatas, colocaremos la mitad del magret cortado en láminas, salpimentaremos (mejor con sal maldon y pimienta recién molida) y salsearemos. Decoraremos con las moras enteras y espolvorearemos un poco de cebollino picado.

Deseo que disfrutéis de este plato y paséis un feliz fin de semana. Nos vemos el martes.