Un postre fácil de preparar y sorprendente para quien lo come. Resulta un postre muy ligero y fresquito para éstas épocas que se van acercando (a pesar de que hoy hace un día de perros. Lluvia, lluvia y más lluvia). Los ingredientes són muy fáciles de encontrar, diría que lo más importante de esta receta, es el instrumento que vamos a necesitar, una mandolina.
Ingredientes (para 2 raciones aprox.):
1/2 mango (5 rodajas de mango por porción)
1 yogur griego (o uno de cremoso)
1 cucharadita de postre (c/p) de zumo de limón
1 c/p de ralladura de limón
1 cucharada sopera de azúcar glass (si no teneis a mano puede ser azúcar normal)
Preparación:
Pelar una mitad del mango, y con la ayuda de una mandolina ir cortando láminas muy finitas (2-3 mm).
En un bol mezclar el yogur cremoso (que si no teneis otra opción és mezclar yogur natural y queso cremoso a partes iguales), el zumo y la ralladura de limón y el azúcar.
Con cuidado de no romper las láminas de mango ir separandolas y poner una cucharada de la mezcla de yogur en el centro y cerrarlos, ayudandonos con una puntilla, formando un ravioli, como si de pasta se tratara.
Os dejo varias formas de presentarlo, en una bandeja todos juntos, en un plato formando un circulito o acompañados con el yogur (que nos sobre) licuado con mango.
Espero que os guste.
Em sembla una idea fantàstica! ens encanta el mango i tenim mandolina... o sigui que no hi ha excusa!
ResponderEliminarPetonets!
Sandra
Muy buena idea. Tiene una pinta preciosa y además es poco calórico y utilizando sacarina apto para diabéticos.
ResponderEliminarMuchas gracias por compartir esta receta.
Un beso,
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