Tartaletas Capricho; naranja amarga y crema de chocolate

Receta para Navidad.

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Tartaletas Capricho....¿y porqué las he llamado así? Porqué fueron simple y llanamente un capricho de la cocinera. 

Tenía un poco de pasta quebrada en la nevera, y al ver el bote de mermelada de naranja amarga en el armario, mi imaginación hechó a volar y acabó saliendo esta exquisitez.

Podéis prepararlas para fiestas, eso si, no hagáis más de dos o tres por cabeza porqué llenan bastante. Yo os aconsejaría que las sacarais con los cafés, o a media tarde. Seguro que gustan a todo el mundo.

Eso si, no os olvidéis, que cada día puede ser una gran fiesta, y ¿porqué no sorprender a los vuestros un día cualquiera con un dulce bocado?

¿Os animáis a prepararlas?

Ingredientes (para 16 tartaletas):

     Para la pasta quebrada:

125 gr de harina

65 gr de mantequilla, a temperatura ambiente

1 huevo pequeño

1 pizca de sal

     Para la crema de chocolate:

200 ml de leche

200 gr de chocolate negro de cobertura

1 cucharada sopera de miel

25 gm de maicena

     Para las cortezas de naranja:

La piel de una naranja

100 ml de agua

50 gr de azúcar

4 cucharadas soperas de mermelada de naranja amarga

Preparación:

La pasta quebrada es muy fácil, más incluso que salir al supermercado a comprarla. En un cuenco mezclaremos la harina con la mantequilla, que habremos cortado a daditos y dejado a temperatura ambiente durante una hora (así estará blandita). Debéis trabajar con las manos e ir chafando la mantequilla con la harina. Os quedará con un tacto granuloso, como si fuera arena, más o menos. Añadiremos una pizca de sal y un huevo batido, mezclaremos todo bien, pero sin trabajar la masa demasiado. Cuando lo tengamos todo bien integrado, formaremos una bola, la taparemos bien con papel film y la dejaremos reposar en la nevera mínimo 1 hora para que la mantequilla endurezca.

Nota: podéis tener preparada la pasta quebrada con antelación (hacerla la noche anterior por ejemplo) y tenerla guardada en la nevera. Bien tapada os durará 1 día sin problema; eso si, tener en cuenta que si la dejáis mucho en la nevera cuando la vayáis a trabajar eso será una roca. Tener la precaución de sacarla de la nevera una media horita de poneros manos a la obra y listo.

Para formar las tartaletas, sólo tenéis que estirar la masa, de medio dedo de grosor, aproximadamente, y con la ayuda de un molde o aro redondo (y sino, con un vaso) ir cortando redondas del tamaño del molde en el que vayáis a hornearlas. Hay moldes metálicos apropiados, y hechos para éste fin, para las tartaletas, pero como no tengo, utilicé los moldes de silicona de hacer las magdalenas, y como podéis ver, quedaron de lujo. Presionar la masa bien en el molde, en el fondo y en los laterales, y poner a cocer durante 15 minutos en el horno precalentado a 180ºC. Se os desoldaran sin problemas. Sólo tendréis que dejarlas enfriar bien para poderlas rellenar.
Nota: éste paso lo podéis tener hecho con un día de antelación, y guardarlas en una caja metálica o un tupper bien cerrado.

Para la crema de chocolate, pondremos en un cazo la mitad de la leche, con el chocolate troceado y la miel a fuego medio para que se vaya derritiendo el chocolate. Lo tendremos que tener vigilado, ya que no queremos que se nos queme.

En un cuenco mezclaremos la leche restante junto con la maicena. Cuando hayan desaparecido todos los posibles grumos, lo añadiremos al cazo con el chocolate y removeremos bien para que espese y no se formen grumos. Cuando ya haya tomado la textura y la densidad de una crema pastelera, lo retiraremos del fuego y dejaremos enfriar.

Por último la corteza de naranja, deberemos pelar una naranja, que ya tendremos bien limpia, y cortar la cáscara en tiras bien finas y no muy largas. En un cazo o sarten pequeña, pondremos el agua y el azúcar junto con las tiras de piel de naranja y dejaremos confitar alrededor de media hora a fuego suave. La mejor comprobación de si está, es catarlas. Cuando estén blanditas, las podremos retirar del fuego, y dejarlas secar encima de un papel de horno.

Para rellenarlas, tan fácil como rellenar hasta la mitad de las tartaletas de pasta quebrada con mermelada de naranja, cubrir con un poco de crema de chocolate fria (si os ayudáis de una manga pastelera os quedará más bonito) y por último colocar unas cortezas de naranja encima para decorar.
Nota: no las tengáis en la nevera mucho tiempo, ya que con la humedad de la mermelada se humedecen y pierden todo su encanto. Ya veis que rellenarlas es un santiamén si lo tenéis todo listo.
Si la naranja no os acaba de gustar, también podéis hacerlas de frambuesa, (cambiar la mermelada por una de frambuesa y decorar con una frambuesa) o con mermelada de frutos del bosque y unas grosellas por encima,..., en fin, a vuestro gusto.

Os aseguro que os las volverán a pedir. Nosotros ya hemos repetido :)