Por fin parece que el tiempo se arregla un poquito. De nuevo resplandece el sol y empiezan a apetecer cosas fresquitas y ligeras.
Ésta ensalada es perfecta para dejarla preparada por la mañana y comerla al mediodia.
Animaros a prepararla, seguro que repetireis.
500 gr de judías verdes finas
1 tomate de ensalada grande y maduro
1 diente de ajo
Tomates cherrys (para decorar)
3 cucharadas soperas (c/s) de aceite de oliva virgen extra
1 c/s de vinagre de vino/manzana
Pizca de sal
Preparación:
En ésta ocasión utilicé judías congeladas extrafinas de La Sirena (salen estupendamente). Las herviremos en agua con una pizca de sal hasta que estén aldente (unos 5 minutos). Seguidamente las refrescaremos en agua muy fría y hielos (si tenemos a mano) (así mantendrán el color verde tan bonito que tienen las judías).
Pelaremos el tomate de ensalada, le retiraremos las semillas y lo cortaremos a daditos pequeños. También pelaremos el ajo, lo partiremos por la mitad y le quitaremos la parte central y también lo picaremos a daditos muy pequeños.
En un bol, y con la ayuda de unas tijeras cortaremos las judías (bien escurridas) a trozos más pequeños, añadiremos el tomate y el ajo a dados y mezclaremos.
Con la ayuda de la batidora emulsionaremos la vinagreta (aceite, vinagre y sal). La mitad de la vinagreta la añadiremos al bol y la otra la reservaremos para emplatar. Cúanto más rato lo dejemos macerar mejor sabor adquirirá.
A la hora de emplatar utilizar un molde, y decorar con tomatitos cherrys partidos por la mitad. Regar con un hilito de vinagreta y listo para comer. ¿Que os parece?
Espero que os guste.
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